Algunos conceptos que a veces se manejan erróneamente en los medios

Estar en un medio de comunicación implica mucha responsabilidad. Pero muchos, en su afán de protagonismo, usan estas ventanas mal y terminan desorientando en lugar de ayudar a que las personas tomen decisiones más acertadas y coherentes. Se habla mucho de las grasas, los azúcares, los edulcorantes y los productos light o diet, entre otros, como contenidos ‘venenosos’ en determinados alimentos, frente a otros que podrían (porque aparentemente así se ven) ser ‘saludables’.


Tomo como ejemplo el jugo de naranja. La gente pasea por los centros comerciales de Lima y otras provincias orgullosa con su gran vaso de ‘jugo de naranja puro y absolutamente nutritivo’, haciendo gala de su buena elección. O compran botellas de 600 ml de jugo recién exprimido en el autoservicio y cuentan cómo le dan a sus hijos en la mañana este bendito brebaje de poderosa vitamina C en señal de buenos cuidados nutricionales.

"UN VASO DE JUGO DE NARANJA ‘RECIÉN EXPRIMIDO ’DE SUPERMERCADO TIENE 41 G DE AZÚCAR: UNAS 8 CUCHARADITAS DE AZÚCAR. "

Un vasito promedio de esos que dan en todas la juguerías de moda tiene unos 500 ml. ¿Usted se imagina cuál es la composición de este jugo? Pues se la detallo: este vaso aportaría  unas 165 kcal y 41 gramos de azúcar (unas 8 cucharaditas) directos a la vena y sin fibra porque solo es zumo. Sin contar que si se toma con la boca recién lavada, se daña la dentina de los dientes. Para terminar, muchos cítricos pueden actuar como posibles alérgenos y no se rotulan los mismos con alguna advertencia. Todo ello en el marco de que como es una fruta, consideramos que es natural y por ende sana.

Otro ejemplo es lo que significa light. El otro día escuché con horror lo que en una radio local decían sobre esta definición. Explicaban que light o zero es porque no se le agrega más contenido de azúcar del que ya tiene naturalmente. Y las Normas Técnicas Peruanas (en cuya elaboración he participado) explican que un producto es light cuando se ha disminuido 25% (en cantidad relativa) de algún nutriente respecto a su versión regular. Es decir, si una leche tiene 3 gramos de azúcar en 100 ml, bastará con reducirle el 25% de la grasa para poder llamarla light en grasa.

Eso no significa que sea descremada o semidescremada o parcialmente descremada. Para muestra dicen un botón, pero aquí otro más: la palta, una fruta tan deliciosa e incluso ‘cardiosaludable’. Tiene en 100 gramos 12,5 gramos de grasa (equivalentes a casi 1 cucharada de aceite). 1/3 de palta mediana pesa alrededor de 100g, lo que en buen romance significa que en ese pequeño pedazo estamos comiendo el 20% o la quinta parte del requerimiento diario de grasa.

Nadie se come 1/3 de palta, mínimo es la mitad.Y es que en la nutrición, como toda ciencia dinámica, no hay nada al 100%. Todo es relativo, ya que dependerá no solo de la composición química del alimento (calidad), sino también de la cantidad y frecuencia con que se consuma. Y para los que opinan alegremente en los medios, mucho cuidado con lo que se dice y cómo se dice.