Antecedentes familiares: Si tus padres o un pariente cercano tienen hipertensión, estás en riesgo de sufrir la afección. Los médicos aconsejan investigar los antecedentes médicos de la familia.
La edad: A medida que las personas envejecen, tienen un mayor riesgo de hipertensión y enfermedad cardiovascular. Esto se debe a que los vasos sanguíneos pierden su flexibilidad con el paso del tiempo, lo que lleva a una presión más alta sobre el sistema cardiovascular.
Sexo: Los hombres son más propensos que las mujeres a sufrir hipertensión, hasta los 45 años.Entre los 45 y los 50, el riesgo es más o menos el mismo en ambos sexos. Después de los 64 años, las mujeres son más propensas a la enfermedad que los varones.
Sedentarismo: Estar demasiado tiempo inactivo aumenta el riesgo de tener esta enfermedad. Se recomienda hacer ejercicio con regularidad para reducirla.
Exceso de sal: La sal retiene líquido excesivo en el cuerpo, de forma que puede acumularse y sobrecargar el corazón, elevando el riesgo de hipertensión. “La sal es necesaria, pero a lo máximo una cucharadita. El problema es que muchas personas consumen tres o cuatro veces más”, advierte el nutricionista José Antonio Quispe Palacios.
La gordura: Vigila tu peso. Si tienes sobrepeso, perder entre 4 y 9 kilos puede ayudar a reducir la presión arterial. También se recomienda moderar el consumo de alcohol. No másde dos bebidas
al día.
0 comentarios:
Publicar un comentario